Consejo Directivo: Tablas salariales atentan contra la dignidad de los universitarios

11-07-18.-

El Consejo Directivo (CD) de la Universidad Simón Bolívar conoció “con profundo estupor” las tablas salariales de sueldo hasta julio de 2018, establecidas por el Ministerio del Poder Popular para la Educación Universitaria, Ciencia y Tecnología.

El CD, tras la sesión extraordinaria del 6 de julio donde se conocieron las tablas, acordó dirigirse al país mediante un comunicado, en el que destaca que estas “tablas salariales atentan contra la dignidad de las personas que forman parte del sector universitario; llegan a destiempo, en un momento económico de creciente hiperinflación que coarta cualquier posibilidad de ajustarse a la realidad de lo que puede ser adquirido en cuanto a bienes y servicios por los profesores, trabajadores y obreros de nuestras casas de estudio”.

Indica el comunicado que el monto del sueldo básico de un profesor titular a dedicación exclusiva, con veinte años de experiencia, doctorado y varios ascensos en su escalafón, según este instrumento, es de apenas cincuenta millones de bolívares, menos de la sexta parte de la canasta básica mensual. “Un monto inaceptable y desajustado con respecto a la realidad económica y a todos los acuerdos internacionales de los que nuestro país es firmante, y, por ende, de la Constitución Nacional”.

Señala el CD que las tablas son aprobadas de forma impositiva e inconsulta, son “consideradas solo entre el gobierno y los gremios afectos, contrariando así lo establecido por la Organización Internacional del Trabajo (OIT) para las discusiones de las condiciones laborales de manera tripartita”.

Contrarían, además, “abiertamente los Derechos Humanos en cuanto a que los ciudadanos deben tener un empleo que les garantice la alimentación, la vestimenta, la protección social de la familia, la recreación, vivienda y otros elementos indispensables para una vida digna. Tal cual lo establece, de similar manera, la Constitución Nacional”.

Las tablas recién aprobadas, “seguramente incidirán en la profundización de la diáspora del personal universitario, en la conflictividad indeseada en los sectores académicos, y contribuirán con la desesperante situación que hoy se vive en nuestros recintos, lo cual ha llevado a la paralización de actividades”. El apoyo de la Sociedad es requerido para lograr una mejoría de esta situación que ha sumergido en una profunda crisis a las instituciones de educación universitaria en Venezuela.